Era el día de año nuevo y nosotros nos levantamos a las 5,30 de la mañana para irnos de excursión a STONEHENGE.
Este monumento prehistórico está ubicado muy cerca del bonito pueblo de Salisbury, a unas dos horas en coche desde Londres. Se puede alquilar un coche, ir en autobús o contratar una excursión organizada, que fue lo que hicimos nosotros.
Stonehenge es un conjunto megalítico formado por bloques de roca colocados de forma circular. La utilidad que se le dio en su día a este conjunto no se sabe con certeza pero las hipótesis andan entre monumento funerario, templo religioso o centro de observación de las estrellas.
Sea como fuere, admirarlo es una maravilla. Pensar que ese conjunto de rocas lleva ahí desde el Neolítico es cuanto menos curioso e interesante. Además, al amanecer o al atardecer, con el sol filtrándose entre los bloques, aún resulta más bello e inquietante.
Para mí, se trata de una visita obligada si se está cerca de la capital británica. No os lo perdáis si tenéis ocasión. Y si también os podéis acercar a conocer el pueblo de Salisbury os aseguro que no os defraudará.
Nosotros en esta ocasión no lo visitamos ya que nos fuimos de vuelta a Londres para presenciar el desfile de año nuevo que se celebra (por todo lo alto) por las principales calles de la ciudad.
Acudimos a la animadísima TRAFALGAR SQUARE donde había instaladas pantallas gigantes para ver distintos puntos del recorrido del desfile. Desde allí fuimos caminando hacia la zona de WESTMINSTER y fuimos viendo a la vez el animado desfile compuesto por gente de lo más variopinta: publicidad de los musicales del WEST END, animadoras deportivas, gente tocando música y una multitud de personajes recorriendo las principales arterias de Londres. Todo un espectáculo de año nuevo que nos impresionó y nos encantó.
Desde el BIG BEN ya cogimos el metro y nos fuimos hacia HYDE PARK a dar una paseo. Pasamos allí el resto de la tarde y, después de una ducha en el hotel, bajamos a cenar al pub inglés que teníamos más cerca. Devoramos un pastel de carne y una hamburguesa. Ambos regados con dos cervezotas bien grandes. Nos lo habíamos ganado con creces…jajaja.
En el siguiente post os contaré nuestro último día por tierras inglesas y nuestra excursión a: Oxford, Stratford-upon-Avon y al Castillo de Warwick. ¡No os lo perdáis!
STONEHENGE:
TRAFALGAR SQUARE:
HYDE PARK:
¡FELIZ DÍA!
